Del diario "Il Domani di Bologna", jueves 1º de junio de 2006, pág. 16:

El exilio espiritual según Wu Ming
La entrevista. El colectivo de escritores rompe el silencio del último año y nos cuenta acerca de su nuevo libro
entre el “socialismo de cuartel” y el retiro voluntario de una ciudad “que ya no ofrece estímulos”


Alessandra Testa


Cercasi bussola persa da capoluogo di provincia del centro-nordDiez años de retiro espiritual [1] para producir tres libros. Y el primero de la trilogía, obviamente histórica, ya casi está llegando. Lejos de todo, del público, de la ciudad (y para ellos no es un gran sacrificio), de los lectores [2]. Aquí explicamos el silencio de Wu Ming (anónimo, no famoso, en chino mandarín) que desde la primavera del año pasado ha inaugurado un período sabático propiamente dicho. Y es porque "la última gira, la 'de relevos' para Guerra agli umani y New Thing, fue particularmente extenuante: casi cien fechas en un año, ¡ni siquiera los Iron Maiden de Live After Death!" Por la fatiga dice Wu Ming 1, seudónimo de Roberto Bui. La verdad es que el colectivo boloñés –cuyas obras pueden descargarse on line desde siempre y que hace del copyleft su filosofía editorial-- ha crecido. Y para parir lo que ya es la empresa más ambiciosa de su carrera necesita concentración, en serio.

En la primavera del próximo año terminará vuestro período sabático. ¿Cómo va eso?

Por "sabático" entendemos la suspensión de nuestra actividad on the road, nada de presentaciones, nada de apariciones públicas. Es algo que nos cuesta: encontrarnos con los lectores, confrontarnos con ellos, siempre ha sido una parte fundamental del proyecto, desde la publicación de Q. Hemos hecho unos 250 encuentros con los lectores. No era posible seguir con un ritmo así, porque además mientras tanto hemos sido padres y nuestras compañeras nos necesitaban. Y nos estamos haciendo más viejos, baste decir que apenas he citado los Iron Maiden. Hasta una cierta edad logras controlar ciertos "ajetreos", puedes dormir en cualquier parte, incluso en el suelo de un establo, cerca del abrevadero de los caballos. Con los años, todo es mucho más difícil. Pero el motivo principal es que nos estábamos embarcando en la empresa más ambiciosa de nuestra carrera. Teníamos que volcarnos con cuerpo y alma en la escritura. Estamos totalmente sumergidos en la investigación y la escritura, y nos ocupamos de la parte telemática de nuestro trabajo...

Es decir...

Respondemos a todos los correos electrónicos que recibimos, realizamos cinco boletines electrónicos en diversos idiomas, mantenemos actualizado el sitio. El único límite: nada de giras.

También para Q y 54 os habéis tomado tres años. ¿Adelantos del neonato? Sólo sabemos que se llamará Manituana y que se publicará en la colección Stile Libero de Einaudi. ¿Qué significa el título? Cuéntanos algo más.


Manituana, en lengua iroquesa, significa "jardín del gran espíritu". La novela es la primera de una trilogía que se desarolla en los años setenta del siglo dieciocho, entre Europa y las colonias norteamericanas, en pleno conflicto social.

Durante estos últimos años habéis escrito sobre todo individualmente. ¿Manituana es un regreso a la escritura colectiva?

Los libros "solistas" de los miembros del colectivo son momentos de experimentación necesarios. Se ensayan diversas técnicas narrativas, nos "desahogamos" con historias más personales e idiosincráticas, nos concentramos en pequeños rompecabezas narrativos. En la mayoría de los casos, son libros menos "comerciales" (dicho sin ánimo de injuria) que los escritos en grupo. De consecuencia, el colectivo aprovechará las enseñanzas. Además, los libros solistas se influencian recíprocamente: sin el espolón rompehielos representado por Havana Glam de Wu Ming 5 y por Guerra agli Umani de Wu Ming 2, yo no hubiera podido escribir New Thing. A su vez, New Thing ha influenciado Free karma Food (de Wu Ming 5), cuyo imaginario ecocatastrófico ha sido influido por Guerra agli Umani, etc. Pero luego volvemos a escribir juntos, volvemos a la tormenta de ideas alrededor de una mesa, volvemos al gran juego de rol que nos permite entrar en simbiosis, ponerse el uno en la piel del otro, como cuando Spock apoya las yemas en la sien de Fulano o Mengano. Es nuestro pequeño "socialismo de cuartel", y no hay nada más bonito: unidos por un objeto, movilizados, disciplinados, unidad móvil e inteligente, en movimiento entre las dunas como Lawrence de Arabia en guerra contra los turcos. Nosotros somos eso, Wu Ming es eso.

¿Cómo ha evolucionado el colectivo desde su nacimiento (o mejor dicho, de los tiempos del Luther Blissett Project) a nuestros días?

Escribimos mejor. Y hemos aprendido de nuestros errores. Y nuestro público es más internacional: efectivamente hoy somos un escritor global.

Lavorare con lentezza [Radio Alice]. ¿Primera y última experiencia con el cine? ¿O hay algo más en proyecto?


Probablemente primera y última experiencia para el cine italiano. La consonancia con Guido Chiesa ha sido y aún es excepcional, la película fue muy bien acogida, ha ganado diversos festivales europeos, pero es todo el mundo de los cineastas italianos (y todo el aparato mediático) lo que no nos gusta, no nos interesa, nos aburre. En el futuro, si algún productor comprará nuestros textos, no trabajaremos directamente, nosotros no escribiremos el guión, etc. Menos contactos tenemos con ese mundo, mejor es. Cogeremos el dinero, y luego que ellos hagan lo que quieran. Si la película sale buena, tanto mejor. De otro modo, seremos los primeros en decirlo [3].

Ritratto dell'assessore da giovaneBolonia, a menudo sois críticos respecto a la ciudad. ¿Por qué? ¿Apreciaciones sobre el gobierno Cofferati? ¿Y qué pensais de la cultura llevada a cabo por Guglielmi?

¡Bah! No creo que pueda decirse que "a menudo" somos críticos respecto a la ciudad. De hecho, hace al menos tres años que no nos expresamos sobre cuestiones locales si no es en modo fugaz y muy esporádico, como cuando hemos firmado una petición de apoyo, una vez (la del grupo Maschile Plurale para la Casa delle Donne, ndr). No estamos enrolados con ninguna corriente o grupo de influencia de la vida boloñesa, estamos totalmente despegados. A un cierto punto, nuestra relación con la ciudad se ha interrumpido, una relación que se ha agotado, Bolonia ha dejado de darnos estímulos notables. De hecho, no puede siquiera decirse que vivamos en Bolonia: tenemos domicilio aquí, pagamos el impuesto sobre el "rusco" [4], pero no frecuentamos la ciudad, nos sentimos en destierro espiritual y (en varios períodos del año, que tienden a dilatarse) también físico. Eso es todo, son cosas que suceden y ni siquiera importa demasiado. En cuanto a Cofferati, sólo digo que no goza de mi simpatía. De la cultura llevada a cabo por Guglielmi no sé precisamente qué decir: confieso mi total ignorancia sobre el argumento.

¿Proyectos futuros?

Según los planes, la trilogía nos mantendrá ocupados por largo tiempo. Son por lo menos diez años de trabajo.


Notas de WM1

1. No exageremos: con la publicación de cada episodio de la trilogía, una serie de presentaciones las haremos. Seguramente no al ritmo del período 2000-2004, pero al menos un par de zapatos por cabeza los destrozaremos.
2. Esto jamás. Contacto con los lectores hay siempre, y es cotidiano.
3. Yo había dicho "Si es una plasta", pero se ha convertido en "de otro modo" :-)
4. El "rusco", en ítalo-boloñés, es la basura.